En secreto, amor      1982

Argumento, guión y dirección José María Nunes
Producción Enrique Esteban
Jesús Balcazar
José María Nunes
Oriol Ivern
Felipe Omegna
Jefe de producción Carlos Boué
Fotografía José Luis Valls
Montaje José María Aragonés
Música Francesc Burrull
Formato Color
35 mm
Pantalla normal
Duración 98 min.
Intérpretes María Espinosa
José María Blanco
Distribución Filmax S. A.


  

Sinopsis


        Él es un alto ejecutivo, de amplia cultura, responsable, deportista, ama a su mujer y a sus hijos. Su vida está planificada, metódicamente programada.
        Sin embargo una molesta sensación le asalta últimamente con frecuencia; pequeñas cosas, ideas, sensaciones, propósitos, deseos... aparentemente sin importancia, pero que ha ido acumulando en su interior y que no ha podido compartir con nadie.
        Pequeños secretos escondidos, que le crean un obsesionante sentimiento de soledad y aislamiento; hasta que por fin encuentra la solución. Una solución que llegará a entusiasmarle.
        Contratará a una call-girl en la agencia más prestigiosa, sin importarle el precio, para que sea su compañera "ideal" durante 24 horas: deberá ser joven, atractiva, sensible, espontánea, elegante, culta, sin inhibiciones y muy comprensiva. Y le contará sus más íntimos secretos... aquellos que nunca se ha atrevido a contar ni a su mujer ni a sus mejores amigos.
lobby card, coloreado a mano
        En esas 24 horas, primero tímidamente y luego a borbotones, brotan muchas cosas: Las inseguridades sexuales del ejecutivo, sus remordimientos de hombre de empresa, de hijo de buena familia que no ha hecho el servicio militar por influencias amorosas de su madre. Y sobre todo, aparece ese vacío que siente todo hombre que aparentemente ha triunfado en la vida, pero que su triunfo le deja insatisfecho; con un amargo sabor de boca.
        24 horas de recelos, entusiasmo, recuerdos, sinceridad; llenas de amor, pasión y ternura.
        Es un film intimista que, a través de sus protagonistas, refleja el drama de tanta gente que por una parte está en desacuerdo con la civilización que le rodea, y por otra parte, se ve incapaz de romper con ella.

  

Notas


        Según la sinopsis, este argumento podría confundirse con una película de las llamadas "S", pero evidentemente Nunes trasciende toda banalidad. Con todo su película más carnal. Una pareja se descubre frente a la cámara. Sobre todo él. El más necesitado de hacerlo. Él que todo, o casi todo, lo tiene. Nunes nos habla poéticamente a través de ambos, desdoblandose, evitando el didactismo.
        Hallazgos de montaje tales como mostrar en el flashback de la jornada escenas no proyectadas anteriormente. Me parece un acierto: recuerdan ellos, no el espectador.

  

Comentario de Nunes



        Otra vez otra larga temporada, de años, sin saber si podría volver a hacer otra película. Algún otro, u otros, intentos que nunca llego a saber porqué, que ahora ya ni recuerdo, no llegaron a concretarse; ni siquiera un proyecto que me propuso Emiliano Piedra, que llegué a hacer el guión, sobre un tema de Alfredo Mañas, que ya lo había desarrollado y que por lo que parece no acababa de gustarle, que yo no leí, que Emiliano me lo contó, de una mujer más o menos famosa, posiblemente una actriz, secuestrada por un farero, en el faro, claro, y me parece que tampoco les gustó mi guión, creo que sobre todo a Emma Penella, que era su mujer e iba a interpretar el personaje. Lo sentí decepcionante; aún sigo creyendo que es un buen guión, después de tantos años, del que no tengo copia, por cierto.
        Pero siempre hay que hacer algo, intentarlo, estar atento a cualquier posibilidad, crearla, inventarla. Desde siempre he dicho, convencido, de que el creador, no me ruboriza utilizar el vocablo aplicándomelo, que aunque no ruede, aunque no se hagan las películas, siempre está, estamos, estoy, haciendo Cine.
        Y En secreto, amor nació una noche charlando con María Espinosa en el "Mesón" de Sant Cugat del Vallés, donde ella tiene una casa antes de entrar en el pueblo yendo desde Barcelona, herencia de la familia de la madre, en la que vivía desde hacía poco y andaba en obras para hacerla mejor habitable porque había estado semiabandonada desde hacía mucho, con aspecto muy para Cine, posiblemente más para película de intriga, o de misterio, o incluso de esas de dar miedo; bastante aislada entonces, rodeada de árboles, pinos centenarios, o casi, una acacia enorme hasta el cielo, al lado de la reja de entrada junto a la carretera, una higuera de mil ramas extendidas detrás de la casa, y otros árboles por allá esparcidos, ciruelos rojos y amarillos, casi todo el terreno alfombrado de intricados zarzales que tapaban los caminos en sus diferentes desniveles, todo asilvestrado.
        Desde tener un ambiente adecuado se puede iniciar un desarrollo; toda idea es buena si surge el entusiasmo.
        "Un actor amigo, de confianza, y tú, en tu casa; sin más, puede ser todo un mundo de Cine." Así empezó. Según el tema, resultaba más apropiado que el personaje de Ella fuera la invitada y el de Él el dueño de la casa.
        A los pocos días le pedí a María Espinosa que escribiera todo lo que recordaba de lo que yo había explicado que podría ser la película.
        No recuerdo qué guión escribí para eso de la burocracia, de la censura, para el permiso de rodaje, que lo dieron advirtiendo que yo no podía ser el director por tener nacionalidad extranjera. ¡Después de tantos años en la profesión y con todas las películas ya dirigidas, todo aquí en España! Cosas de la época de Pilar Miró. Así que la película, oficialmente, está dirigida por mi hija Virginia; doctorada en Biología, con gran prestigio en su especialidad de genética molecular, o algo así.
        Porque el guión se fue haciendo durante el rodaje, a veces por la noche las escenas del día siguiente, u otras en el mismo momento de rodar, improvisando los diálogos en este caso; afortunadamente tanto la Espinosa como Blanco, grandes profesionales, tienen la ágil capacidad de retener enseguida los textos por complejos que sean, que, también, en muchas de las escenas se los iba dando yo, improvisados en aquel momento y que ellos repetían con tal seguridad y facultad de interpretación que emocionaban.
        ¡Ah! el rodaje se hizo por el orden en que las escenas están en la película, una extraordinaria ventaja, la primera vez en toda mi vida profesional, por la facilidad de la localización única de la casa y sus exteriores.
        El actor amigo fue José Mará Blanco, de plena confianza de vieja amistad ya de antes que hiciéramos Biotaxia, en la que se pseudonimó Pablo Busoms, no sabré nunca porqué.
        Hacía poco que había regresado de una larga, provechosa y prestigiosa estancia artística, y de profesorado en la Universidad de Puerto Rico, que aún no lo había visto y me parece que no sabía que hubiese regresado hasta que lo descubrí en su nuevo extraordinario estudio de la calle Martínez de la Rosa en el barrio de Gracia.
        - ¡Hola, Blanco!
        - ¡Hombre, Nunes!
        - ¿Quieres que hagamos otra película?
        - Bueno, claro. ¿Cuándo quieres empezar?
        - Mañana.
        El largo y apretado abrazo anduvo por allá entre frases de no saberse durante años.

lobby card, coloreado a mano


        Tuvimos que esperar un par de semanas para que acabara unos compromisos de publicidad, a lo que siempre se había dedicado con bastantes buenos éxitos especialmente en dibujos animados, de lo que es el gran especialista y de lo que es profesor en Bellas Artes de la Universidad de Barcelona en los últimos siete u ocho años.
        El respaldo para el desarrollo de la producción estaba resuelto con la colaboración de Oriol Ivern y Felipe Omegna, que tenían una empresa, "Auca2" para la que yo les había rodado dos cortos o mediometrajes, El Boter (fabricante de bocoyes) y Curiel i Güelfa, un recordable espectáculo para niños basado en una leyenda medieval, creado e interpretado por Joan Baixas.
        También coprodujeron Enrique Esteban y Jesús Balcazar que se responsabilizaron de los costes de la parte industrial, película virgen, laboratorios, salas de montaje y de sonido; y, como productores de largo historial, se hicieron cargo de los asuntos oficiales, por lo que la titularidad de la producción está a su nombre, "Este Films" y "Producciones Balcazar".
        ¡Uf! qué complicado es recordar y escribir sobre ésto!
        Del rodaje es más fácil recordar; por ejemplo aquella noche en que Él sale al exterior a buscarla a Ella iluminándose con un candelabro de velas, que estaba siendo utilizado como única iluminación en el rodaje de la cena, y el viento se empeñaba en apagarlas dejando sin luz la escena que intentamos y logramos por fin rodar. La habilidad de Blanco protegiendo con su cuerpo las ráfagas de viento que insistían en atacar el candelabro. Todo muy natural, claro. Y ahí está. Como resultado del experimento de Josep LLuis Valls de rodar con la luz de las velas, en lo que yo insistí y él tuvo que pedir alguna caja de material más sensible  que el que utilizábamos normalmente, que dijo que acababa de salir y no sabía si ya lo tendrían. Y ya lo tenían, afortunadamente; aunque aquí ahora entre nosotros debo aclarar que en algún plano tuvo que ayudarse con algún pequeño proyector, en la delicada escena de cuando se encuentran y su relación de intimidad entre los matorrales al mismo tiempo que al otro lado del seto, sin que se vean ambas parejas, también un caballo y una yegua juegan en su relación íntima.
        Todas las películas tienen, durante el rodaje, anécdotas que jamás se olvidan; algunas también desagradables, según he oído.